Descubre la historia del lomo de cerdo, aprende consejos para cocinarlo y prepara esta receta fácil y llena de sabor.
1 kg. de lomo de cerdo
40 g. de mostaza
50 ml. de aceite de oliva con ajo
2 dientes de ajo, picados
1 cucharada de romero fresco, picado
1 cucharada de tomillo fresco, picado
40 g. de rub rojo
30 g. de mantequilla derretida
1 lata de sangrita blanca (la puedes encontrar en tu tienda física Wild Fork más cercana)
1/2 taza de caldo de pollo o vegetales
Retira el lomo de cerdo del congelador y colócalo en refrigeración 24 horas antes de cocinar.
Precalienta el horno a 180 °C. Retira el lomo de su empaque, sécalo con papel absorbente, unta mostaza sobre toda la superficie y sazona con rub rojo. Reserva.
En un tazón pequeño, mezcla mantequilla derretida, aceite de oliva con ajo, ajo picado, romero y tomillo. Revuelve bien hasta integrar todos los ingredientes.
Calienta una sartén grande a fuego alto. Sella el lomo por todos los lados, aproximadamente 2–3 minutos por cada lado, hasta que esté dorado. Retíralo de la sartén y colócalo en una charola para horno.
En la misma sartén, vierte la sangrita blanca y raspa el fondo para desprender los sabores caramelizados del lomo. Deja evaporar el alcohol durante 2 minutos, agrega caldo de pollo o de vegetales y deja hervir. Vierte esta mezcla en la charola junto con el lomo.
Baña el lomo con la mezcla de mantequilla, aceite y hierbas, asegurándote de cubrirlo completamente.
Hornea durante 30 minutos. Luego, retira del horno, añade las papas cambray alrededor del lomo y hornea de nuevo durante 15–20 minutos más, o hasta que la temperatura interna de la carne alcance los 64 °C, ideal para una textura jugosa.
Retira el lomo del horno y deja reposar durante 10 minutos antes de cortarlo en rodajas. Sirve acompañado con las papas cambray y bañado con los jugos de la charola.