Preparación de Bogavante: Historia, Consejos y una Receta para Disfrutar este Manjar del Mar
Descubre la historia del bogavante, aprende a prepararlo como un chef y sorprende a tus invitados con esta receta sofisticada y deliciosa.

Descubre la historia del bogavante, aprende a prepararlo como un chef y sorprende a tus invitados con esta receta sofisticada y deliciosa.
Ingredientes (para 2 personas):
2 bogavantes vivos o cocidos (aproximadamente 500-600 g cada uno)
4 cucharadas de mantequilla sin sal
2 dientes de ajo, picados
Jugo de 1 limón
1 cucharadita de perejil fresco, picado
Sal y pimienta al gusto
Aceite de oliva (para engrasar la parrilla)
Prepara los bogavantes: Si los bogavantes están vivos, colócalos en el congelador durante 15-20 minutos para adormecerlos antes de cocinarlos. Luego, con un cuchillo afilado, corta el bogavante por la mitad longitudinalmente, desde la cabeza hasta la cola. Retira el saco intestinal y el estómago (ubicados en la cabeza).
Precalienta la parrilla: Calienta la parrilla a fuego medio-alto y engrásala ligeramente con aceite de oliva.
Prepara la mantequilla de ajo: En una sartén pequeña, derrite la mantequilla a fuego bajo. Agrega el ajo picado y cocina durante 1-2 minutos, sin dejar que se dore. Retira del fuego y añade el jugo de limón y el perejil. Sazona con sal y pimienta.
Asa los bogavantes: Coloca las mitades de bogavante en la parrilla, con la carne hacia abajo. Cocina durante 5-6 minutos, luego voltea y pinta la carne con la mantequilla de ajo. Cocina por otros 4-5 minutos, o hasta que la carne esté opaca y firme.
Sirve: Retira los bogavantes de la parrilla y sírvelos con la mantequilla de ajo y limón restante. Acompaña con limones frescos y una ensalada ligera.
Consejos para Preparar Bogavante Perfecto:
Elige bogavantes frescos: Si es posible, compra bogavantes vivos y asegúrate de que estén activos y con las pinzas bien cerradas.
No sobrecocines: El bogavante se cocina rápidamente. Cocínalo justo hasta que la carne esté opaca y firme para evitar que se endurezca.
Usa mantequilla de calidad: La mantequilla realza el sabor natural del bogavante, así que elige una de buena calidad.
Acompaña con vino blanco: Un vino blanco seco, como un Chardonnay o un Sauvignon Blanc, es el complemento perfecto para este platillo.
El bogavante, también conocido como langosta americana, ha sido un manjar apreciado desde la antigüedad. Sin embargo, no siempre fue considerado un alimento de lujo. En el siglo XVII, en América del Norte, el bogavante era tan abundante que se usaba como alimento para prisioneros y sirvientes. Incluso se molía y se utilizaba como fertilizante.
Fue en el siglo XIX que el bogavante comenzó a ganar popularidad entre las clases altas, especialmente en ciudades costeras como Boston y Nueva York. Su sabor delicado y su textura firme lo convirtieron en un ingrediente estrella de la alta cocina. Hoy en día, el bogavante es sinónimo de elegancia y celebración, y se sirve en ocasiones especiales en todo el mundo.