Descubre la historia del asado, encuentra ideas creativas para acompañarlo y prepara una guarnición deliciosa que todos amarán.
Ingredientes (para 4-6 personas):
6 papas medianas, cortadas en cuartos
3 cucharadas de aceite de oliva
3 dientes de ajo, picados
2 cucharadas de romero fresco, picado
Sal y pimienta al gusto
1/2 limón (opcional, para un toque cítrico)
Precalienta el horno: a 200°C (400°F).
Prepara las papas: En un tazón grande, mezcla las papas con el aceite de oliva, ajo, romero, sal y pimienta. Asegúrate de que las papas queden bien cubiertas.
Asa las papas: Coloca las papas en una bandeja para hornear, en una sola capa. Hornea durante 30-35 minutos, volteándolas a la mitad del tiempo, hasta que estén doradas y crujientes.
Termina con un toque cítrico: Si deseas, exprime un poco de jugo de limón sobre las papas antes de servir.
Sirve: Acompaña tu asado con estas papas calientes y aromáticas.
Consejos para Mejorar las Guarniciones:
Combina texturas: Acompaña el asado con guarniciones crujientes (como papas) y cremosas (como puré o guacamole).
Usa hierbas frescas: El romero, tomillo y cilantro agregan un toque de frescura y sabor.
No olvides las salsas: Las salsas caseras, como el chimichurri o la salsa de chile, elevan cualquier asado.
El asado es una de las técnicas de cocción más antiguas y universales. Desde que el ser humano descubrió el fuego, la carne asada se convirtió en un elemento central de la alimentación. En América Latina, el asado tiene un significado especial, especialmente en países como Argentina, Uruguay y México, donde es una tradición cultural que reúne a familias y amigos alrededor de la parrilla.
En Argentina, el asado es casi un ritual. Se prepara con cortes de carne de res, como vacío, tira de asado y chorizo, y se cocina lentamente sobre brasas de leña o carbón. En México, el asado incluye una variedad de carnes, como pollo, cerdo y res, y se acompaña con tortillas, salsas y guarniciones. Hoy en día, el asado es sinónimo de celebración, comunidad y sabor en todo el mundo.
Un buen asado no está completo sin guarniciones que complementen su sabor. Aquí tienes algunas ideas clásicas y creativas:
Ensaladas frescas:
Ensalada de tomate, cebolla morada y aguacate.
Ensalada César con pollo a la parrilla.
Ensalada de quinoa con vegetales asados.
Vegetales asados:
Papas al horno con romero y ajo.
Elotes asados con mayonesa, queso y chile en polvo.
Pimientos y cebollas caramelizados.
Salsas y dips:
Guacamole fresco.
Salsa chimichurri (ideal para carnes).
Salsa de chile habanero para los amantes del picante.
Acompañamientos tradicionales:
Arroz blanco o arroz verde.
Frijoles charros o refritos.
Tortillas de maíz frescas.
Pan y carbohidratos:
Pan de ajo casero.
Arepas o pupusas.
Papas fritas o camotes al horno.