Camarones empanizados crujientes servidos con una ensalada fresca de lechuga, rúcula y aguacate, aderezada con limón y mostaza Dijon. Una receta ligera, rápida y perfecta para días cálidos.
1 paq. de camarones empanizados
1 paq. de tortillas de harina
40 g. Salsa taquera
40 g. Salsa blanca
300 g. de lechuga romana, cortada en trozos
100 g. de tomates cherry, partidos a la mitad
50 g. de cebolla morada fileteada
15 ml. de aceite de oliva
10 ml. de vinagre balsámico
Sal ahumada con pimienta y ajo
10 ml. jugo de limón
Precalienta la freidora de aire a 210 °C. Coloca los camarones empanizados en la canastilla sin encimar y cocina durante 12–15 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes. Reserva calientes.
En un tazón pequeño, mezcla:
Aceite de oliva
Vinagre balsámico
Jugo de limón
Sal ahumada con pimienta y ajo
Bate bien hasta emulsionar. Reserva.
En un bol grande, mezcla:
Lechuga (lavada y troceada)
Tomates cherry partidos a la mitad
Cebolla morada en plumas finas
Agrega el aderezo, mezcla bien y reserva en refrigeración hasta el momento de servir.
Preparar el aderezo taquero
En otro recipiente pequeño, mezcla a partes iguales:
Salsa taquera
Salsa blanca
Mezcla bien hasta integrar. Reserva.
Sirve una porción de ensalada como base en cada plato. Coloca encima los camarones empanizados calientes. Baña con el aderezo de salsa blanca y taquera. Acompaña con tortillas de harina calientes.